Las tiendas de productos regionales son auténticos escaparates de las tradiciones y el saber hacer de nuestra región.
Son un intermediario privilegiado entre sus clientes y sus proveedores. Muy invertidos en la economía local gracias a la relación privilegiada que han forjado con los productores, ofrecen productos de calidad a la venta.
Los criadores de patos locales, los granjeros locales, los viticultores locales, los fabricantes de galletas vecinos y otros creadores auténticos encuentran su lugar en los estantes para llenar sus canastas con comida 100% local.